Informe anual de ciber-seguridad Cisco 2017

Ha sido publicado la décima edición de su Informe Anual de Ciber-seguridad Cisco, en el que destaca el incremento de vectores de ataque clásicos y la necesidad de reducir el tiempo de detección.

El Informe Anual de Ciber-seguridad 2017 de Cisco revela a lo largo de sus más de 100 páginas una gran cantidad de datos, estadísticas y conclusiones interesantes.

El documento se divide en diversas secciones: comportamiento del atacante, comportamiento del defensor, Cisco 2017 Security Capabilities Benchmark Study, industria y conclusiones.
En el comportamiento del atacante se examina las formas en que los atacantes reconocen las vulnerabilidades y distribuyen el malware. Se explica cómo los atacantes convierten en armas algunas herramientas como el correo electrónico, aplicaciones cloud o el adware. Tras esto, en el comportamiento del defensor se ofrecen datos y estadísticas sobre las vulnerabilidades descubiertas y la necesidad de parchear los sistemas y todo tipo de aplicaciones.
Por otra parte el Cisco 2017 Security Capabilities Benchmark Study se basa en los resultados de entrevistas a cerca de 3.000 directores de Seguridad (CSOs, Chief Security Officers) y responsables de Operaciones de Seguridad de 13 países. Este apartado revela las percepciones de los profesionales de seguridad en sus organizaciones.
Por otra parte, se señala la importancia de la industria en la seguridad, la importancia de garantizar la seguridad de la cadena de valor. Así como la importancia de la actuación de los gobiernos sobre la seguridad, por ejemplo el posible daño que puede causar el guardar información sobre exploits día cero y vulnerabilidades en productos, sobre los que no siempre son transparentes sobre la información que poseen.
Por último, un apartado de conclusiones en el que se sugiere que los defensores deben adaptar sus prácticas de seguridad para poder enfrentarse a los típicos desafíos de seguridad a lo largo de la cadena de ataque y reducir el espacio operacional de los atacantes. Se ofrece orientación específica para establece un enfoque integrado y simplificado de la seguridad, que conecte el liderazgo ejecutivo, la política, los protocolos y las herramientas para prevenir, detectar y mitigar las amenazas.

 


Datos reseñables

Entre las principales barreras citadas por los CSOs para mejorar sus procesos de seguridad destacan los presupuestos limitados, la escasa compatibilidad de sistemas y el déficit de profesionales. Estos responsables también afirman que sus departamentos de seguridad son entornos cada vez más complejos. Un 65% de las organizaciones consultadas utilizan entre seis y más de 50 soluciones de seguridad, lo que les lleva a reducir potencialmente su efectividad y aumentar los posibles problemas de seguridad.

Es curioso el incremento del spam como modelo de ataque, con niveles no vistos desde 2010. El spam supone cerca de las dos terceras partes (el 65%) de todos los correos electrónicos, siendo maliciosos entre el 8 y el 10% de ellos. El volumen de spam está aumentando a escala global, a menudo propagado por grandes y crecientes botnets.

 


También se destaca el riesgo que representan las aplicaciones «cloud» de terceros introducidas por los empleados, hasta el 27% fueron consideradas como de alto riesgo y generaron preocupaciones de seguridad significativas. El clásico adware (software que descarga publicidad sin el permiso del usuario) ha mantenido su efectividad, infectando al 75 por ciento de las organizaciones investigadas.

Resultan preocupantes los datos sobre las alertas investigadas y remediadas, ya que se desvela que solo el 56% de las alertas de seguridad recibidas son investigadas. La mitad de ellas (28 por ciento) se consideran legítimas; pero menos de la mitad (46 por ciento) de las alertas legítimas son remediadas. Un dato que revela el trabajo tienen los administradores de operaciones de seguridad reside en que el 44 por ciento puede llegar a ver más de 5.000 alertas de seguridad diarias.

El coste de un ataque

Un apartado interesante revela el impacto que tienen los ataques para los negocios, desde pymes hasta grandes empresas. Para más de la mitad de las organizaciones que sufrieron un ataque el incidente se hizo público. Los procesos de operaciones (parada de sistemas de productividad críticos) y de finanzas fueron los más afectados, seguidos por reputación de marca y retención de clientes.

Para las organizaciones que sufrieron un ataque, las consecuencias fueron sustanciales:

  • El 22% de las organizaciones atacadas perdieron clientes (el 40% perdieron más del 20% de su base de clientes).
  • El 29% perdieron ingresos, y un 38% de ellos tuvieron pérdidas superiores al 20% de los ingresos.
  • El 23% de las organizaciones atacadas perdieron oportunidades de negocio (el 42% perdieron más del 20%).

Tras los ataques, el 90% de las organizaciones mejoran sus tecnologías y procesos de defensa frente a amenazas separando las funciones de seguridad y de TI (38%), mejorando la concienciación de los empleados mediante formación (38%) e implementando técnicas de mitigación del riesgo (37%).

El informe puede descargarse desde:

Cisco 2017 Annual Cybersecurity Report

Más información:

Cisco 2017 Annual Cybersecurity Report

http://b2me.cisco.com/en-us-annual-cybersecurity-report-2017

 

Fuente: Hispasec